¿Por Qué No Todas Las Calorías Engordan Igual?

Esta semana quiero hablarte del error que supone darle demasiada importancia a las calorías a la hora de controlar tu peso.

Para perder peso necesitas un déficit calórico (gastar más de lo que comes).

Vale.

Pero guiarte solo por la cantidad de calorías, como si todas fueran iguales, te va a frustrar con tus resultados y tendrás episodios de hambre-ansiedad recurrentes.

Así que hoy te voy a compartir:

      • Por qué es un error comparar alimentos por su calorías
      • 1 ejemplo de cómo cometí ese error en el pasado
      • Lo que recomiendo hacer diferente para controlar tu peso a largo plazo

    La Trampa de las Calorías: No Todas Son Iguales

     

    El error típico es pensar que adelgazar se trata solo de calorías que entran menos calorías que salen. Y esto:

        • Te condena a una vida muy miserable cuadrando números.
        • Ignora que algunos alimentos sacian más que otros, haciendo que comas menos calorías en total.

      Mira este ejemplo rápido:

      Un tiramisú pequeño, tamaño baraja de cartas, tiene unas 450 calorías. Además de que podrías comerte una bandeja entera, en treinta minutos o una hora tendrás hambre otra vez.

      Ahora visualiza:

          • Plato grande de lentejas con verduras y aceite de oliva.
          • Plátano de postre.

        Mismas 450 calorías, pero esta comida te mantiene saciado durante horas. Sin bajones, sin ansiedad.

        O por usar el lenguaje de la calle: esas calorías del tiramisú te engordarán más porque te harán comer más… ahora y después.

        Por eso, la pregunta no es: ¿cuántas calorías tiene esto?

        Sino: ¿cómo me hace sentir esto ahora y una hora después de haberlo comido?

        Mi Experiencia: Contar Calorías No es la Mejor Estrategia

        “¿Pero… todo esto puedo comer?”

        Esa es la frase que más escucho al empezar mis planes.

        Al principio cometí el error de reducir cantidades por miedo a que mis pacientes se asustaran y se fueran con otro nutricionista que les diera suplementos o platos raquíticos.

        Usaba medidas pequeñas: puñaditos, platos de postre, el tamaño de tu palma…

        ¿Resultado?

        Mis pacientes pasaban hambre y yo me fui convirtiendo en el tipo de nutricionista que no quería ser. El que te hace dependiente de la fuerza de voluntad. Cito una frase de un libro de la Dra. Traci Mann que me hizo ver lo absurdo de depender de la fuerza de voluntad:

        Piensa en la fuerza de voluntad como fuerza bruta. La cantidad que necesitas es mayor que la cantidad que tienes, y la cantidad que tienes se agota con demasiada facilidad por casi todo lo que haces. No tiene sentido confiar en ello. En los Holanda dicen: «si no puedes ser fuerte, debes ser inteligente», y esa es la solución al problema de la fuerza de voluntad: usar tu cerebro para asegurarte de que no la necesitas.

        Cuando empecé a recomendar cantidades generosas de alimentos poco densos en calorías (pero saciantes), llegaron los resultados y escuchaba cosas como:

        “Siempre he escatimado con la lata de atún, me has devuelto la vida”.

        “Al llevar una alimentación poco saciante, cuando volvía del gimnasio me entraba ansiedad y me comía un yogur. Pero entonces, decía: ¿ahora qué me tomo? Y me tomaba un paquete de gusanitos”.

        Conclusión:

        las calorías no tienen la última palabra y algo con menos calorías te puede terminar engordando más porque no te deje saciado.

        Ya está.

        Ese sería el mensaje central de hoy.

        Ahora, ¿qué puedes hacer diferente sabiendo esto?

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        En Vez de Calorías, Esto es lo que Funcionó

        Resulta que nuestra sensación de saciedad no viene de lo lleno que esté nuestro estómago, sino de señales que el cerebro recibe.

        Algunos alimentos son capaces de mandar estas señales incluso antes de tragarlos (sí, mientras masticas) o incluso antes de meterlos a la boca, haciendo que te sientas más lleno rápidamente.

        Esta es la revolución de la saciedad que algunos llaman el «Ozempic natural».

        Así que aquí tienes 3 acciones mejores que contar calorías:

            1. Deja de escatimar con frutas, verduras y semillas: Aumenta la ración de lo que consideras “normal” a día de hoy. La fruta ha recibido ataques (SIBO, azúcares, evitar por la noche) que solo contribuyen a una alimentación menos saciante y alejada de la evidencia científica.

          2. Transforma tus comidas principales: Aumenta aquello que tendemos a subestimar: proteínas magras (pollo, pavo, pescado, legumbres) y no le temas tanto a las grasas saludables (aguacate, AOVE y aceitunas no procesadas).

          3. Desarrolla conciencia calórica en lugar de conteo obsesivo: No te digo que las calorías no importen en absoluto. Consumir más calorías de las que se queman conduce al aumento de peso. Por eso, también te animo a ir teniendo una mejor idea de cuántas calorías se necesitan para alcanzar tu objetivo y qué alimentos son más propensos a ayudarte a lograrlo.

          Por ejemplo, un batido de té matcha puede parecer una opción saludable, pero si una mujer pidiera un batido grande de matcha en una cadena de cafeterías famosa, bebería 540 calorías de una sentada, más de un tercio de su asignación energética diaria total, suponiendo una dieta de 1.500 calorías diarias.

          Pero si eligiera un batido pequeño, reduciría esa cifra a casi la mitad, a 300 calorías.

          Es decir, el simple hecho de ser consciente de las calorías del batido puede hacer que opte por el tamaño más pequeño. Así es como puede ayudarte desarrollar “conciencia calórica”.

          En Pocas Palabras

          Ya ves que aquí la palabra clave no es caloría, sino saciedad.

          No se trata de centrarte solo en comer menos calorías. Se trata de comer mejor (a veces, paradójicamente, más cantidad) para que tu cuerpo deje de pedir más.

          Así que…

          ❌ No compares alimentos solo por las calorías

          ❌ No pongas en un pedestal a la fuerza de voluntad

          ✅ Elige alimentos que sacien más, aunque a veces suponga más calorías

          ✅ Busca paz mental, no solo déficit calórico

          Eso es todo por hoy.

          Nos vemos el sábado que viene.

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